Ecuador anunció este miércoles la reducción del 47% de sus puestos
militares hasta 2017, aunque aseguró que mantendrá las unidades en la
convulsa frontera con Colombia que agrupan a unos 11.000 soldados.
La
ministra de Defensa, María Fernanda Espinosa, presentó a lemiembros del
ejerctorensa el "nuevo diseño operacional" de las Fuerzas Armadas que
incluye la reubicación de puntos militares, la reducción progresiva del
pie de fuerza y la adquisición de equipos con el fin de "optimizar"
recursos.
Ecuador, que hasta 1995 libró varios conflictos bélicos
con Perú por problemas fronterizos, cuenta actualmente con 561 puestos
militares, entre cuarteles, bases y batallones y otras estructuras.
De
ese total sólo se mantendrán 297 puestos, lo que implica la reubicación
o eliminación de 264 hasta 2017, explicó la funcionaria.
La
reorganización operativa no afectará la seguridad del Estado ni reducirá
la capacidad de respuesta de las tropas y, por el contrario, permitirá
liberar unas 600 hectáreas para obra pública, aseguró la ministra.
"Muchos
de los espacios liberados van a ser parques urbanos, lugares de
servicio a la ciudadanía y las zonas que están en el área rural se van a
destinar a áreas de conservación", indicó Espinosa.
En abril,
Correa ya había anticipado un recorte del 18% de los efectivos militares
hasta 2025, lo que implicará pasar de 42.000 a 34.500 uniformados, y
justificó la decisión ante "el improbable escenario de una guerra
convencional".
La reorganización de la fuerza militar excluye,
sin embargo, a las unidades que operan en la frontera con Colombia, país
que intenta alcanzar un acuerdo de paz con las guerrillas izquierdistas
para acabar con un conflicto de 50 años.
"Hemos hecho un análisis
de los escenarios posibles. La información que tenemos es alentadora,
pero tampoco quiere decir que el mismo día que se firme la paz en
Colombia nosotros tenemos que retirarnos de la frontera", dijo Espinosa.
El
enfrentamiento armado en Colombia ha obligado a miles de personas a
refugiarse en Ecuador, y convertido la frontera común de 700 km en una
zona afectada por el narcotráfico y el contrabando de armas.
Según
el comandante general de las Fuerzas Armadas de Ecuador, general Luis
Garzón, en caso de firmarse la paz en Colombia su consolidación tomará
al menos "10 años" por lo que "no hace falta que estas unidades de la
frontera norte se muevan".