El Flying Roadster es de una compañía eslovaca, pesa 450 kilos y tiene
alas de fibra de carbono que se pliegan detrás de la cabina
Barcelona (Redacción).- Una de las visiones
recurrentes que el ser humano ha tenido a lo largo del último siglo
acerca del futuro pasaba en muchos casos por un mundo con automóviles
voladores. Desde los Supersónicos a Regreso al Futuro, la ciencia
ficción en la pequeña y la gran pantalla ha tratado este asunto en
diversas ocasiones.
La
idea lleva años en la cabeza de muchos. Sin ir más lejos, la primera
patente es de 1903. Ahora, en 2014, concretamente el 29 de octubre, está
previsto que se presente en Viena, en la conferencia anual para la tecnología del futuro y el emprendimiento digital, el primer coche volador con opciones de ser comercializado.
Se trata del Flying Roadster
de la compañía eslovaca Aeromóvil, que, según parece, realizó su primer
vuelo de prueba en octubre del año pasado. La última versión se pondrá a
prueba un día antes de su estreno, el 28 de octubre.
Juraj Vaculik, cofundador de la empresa, ha señalado a The Guardian
que Aeromóvil ha acelerado el proceso de creación de prototipos después
de haber visto "reacciones entusiastas de la comunidad ingeniera y de
diseño en todo el mundo".
Con un peso de 450 kg, con alas de
fibra de carbono que se pliegan detrás de la cabina y una velocidad
máxima de 124 millas por hora en vuelo, el Flying Roadster tiene dos
plazas.
"Queremos hacer que el transporte personal sea más emocionante, eficiente
y sostenible. Con cada vez más coches en las carreteras y los
aeropuertos cada vez más llenos de gente, viajar ya no es lo que solía
ser", ha señalado un responsable de la compañía.
Anteriormente,
la estadounidense Terrafugia había anunciado su intención de sacar al
mercado un prototipo de automóvil para volar, aunque fechó en dos años
su salida.